“L’État, c’est moi” –Luis XIV rey de Francia
(El estado soy yo, traducción de la expresión francesa L’État, c’est moi, es una frase apócrifa que Luis XIV de Francia habría pronunciado el 13 de abril de 1655 ante el parlamento de París, a los dieciséis años de edad. La expresión identifica al rey con el estado, en el contexto de la monarquía absoluta.)
Por: Lic. George Pozo Branagan
León, España.
El presidente Abinader tiene ya por costumbre esperar las festividades de fin de año para que de manera sigilosa introducir al Congreso de la República proyectos de ley tan lesivos y controversiales como la ley de trata de personas que bajo un título de innegable justicia social, pretendía en su adentro colocar la solución de la inviabilidad del fallido estado haitiano sobre los hombros de los dominicanos, lo cual dichas pretensiones fueron abortadas por la alarma de congresistas de la oposición que dieron la voz de alerta . Ahora tenemos en iguales circunstancias la ley 1-24 o ley del DNI que valiéndose de la mayoría mecánica del gobernante Partido Revolucionario Moderno PRM fue aprobada en segunda lectura, una ley que dada su naturaleza debió ser tratada como ley orgánica.
Exceptuando a Participación Ciudadana que como es bien sabido siempre están del lado de sus amos de turno, todos los sectores consultados expresan que esta ley viola derechos fundamentales, que es antidemocrática y anticonstitucional, lo que constituye un ruido incensario y muy dañino para los aprestos reeleccionista en los que se encuentra el presidente Abinader.
Vemos el artículo 11 nos dice: obligatoriedad de todas las dependencias del estado, instituciones privadas o personas físicas y jurídicas previas a la autorización de un juez o un tribunal competente estarán obligadas a entregar las informaciones al DNI que puedan afectar la seguridad nacional con riesgo de prisión ante su negativa. Se tienen informaciones de que la parte previa a la autorización de un juez o un tribunal competente fue sustituida por guardando las formas legales, la modificación de este artículo si hizo luego de haberse aprobado y enviado el proyecto de ley ya aprobado desde el Congreso hacia la Presidencia de la República.
Es notorio que esta ley contraviene la Constitución de la Republica en sus artículos 44 y sus literales 1 al 4 y el artículo 49 donde con claridad meridiana expresa los derechos de los ciudadanos al resguardo de información sobre su persona física o jurídica. Cabe recordar que el tipo de nuestra Constitución es que la República Dominicana es un Estado Social y Democrático de Derecho, organizado en forma de República unitaria, fundado en el respeto de la dignidad humana, los derechos fundamentales, el trabajo, la soberanía popular y la separación e independencia de los poderes públicos, y a todas luces esta ley desdice la naturaleza de nuestra Constitución.
Bajo el Régimen de la nueva ley de la Dirección Nacional de Información y viendo el estilo de gobierno del presidente Luis Abinader los dominicanos volvemos a vivir sucesos que desde la vuelta a la democracia luego del derrocamiento de Rafael Leónidas Trujillo quien gobernara de manera totalitaria desde el 1930 al 1961 o los pasados los 12 años de gobierno del Dr. Joaquín Balaguer no se habían visto como sucesos como el asalto a la casa nacional del PLD; el allanamiento atropellante del Ministerio Público en contra de La Cámara de Cuentas la cual por escalafón es su superior jerárquico ya que esta es quién audita al MP; el atropello del Tribunal Superior Electoral donde su competencia está expresada claramente en el artículo 212 de la Constitución y no le da dichas competencias al TSE sobre elecciones de gremios profesionales las cuales son competencia de los tribunales ordinarios y el Tribunal Superior Administrativo como última instancia
De manera arbitraria el TSE suspende la juramentación de las autoridades libérrimamente electas y ha llegado a la desfachatez de intervenir con policías y militares el local que alberga al CARD, sumado esto a la juramentación ilegal a todas luces del Lic. Johan López dejando claro el asalto a esa institución por parte del presidente Abinader y el PRM y la callada por respuesta del TSE ante esta engorrosa situación.
El uso de cuarteles militares como comando de campaña proselitista del PRM en franca violación a la ley electoral y la condena de usos de fondos del estado a favor del partido oficialista como recientemente se dieran a conocer los videos de un destacamento militar en Azua era usado como punto de partida y logística de la marcha caravana que encabezará el presidente Abinader por la región Sur de país, no es más que una muestra fehaciente de las malsanas intenciones del oficialismo de cara a las próximas elecciones nacionales.
Estos hechos nos muestran que estamos ante un presidente Abinader quiere volver a los más oscuros capítulos del pasado pretendiendo hacer un gobierno autoritario y opresor, con política del garrote y la opresión disfrazado de progresismo socialdemócrata. Por esto sin duda alguna volvemos a decir que estamos nueva vez ante el Pedro Santana del siglo XXI.